Cuando su cónyuge va a un asilo de ancianos
Incluso cuando los signos de demencia inminente se volvieron imposibles de ignorar, Joseph Drolet temía la perspectiva de trasladar a su pareja a un centro de atención a largo plazo.Drolet, de 79 años, y su amada Rebecca, de 71, ambos abogados y fiscales jubilados de Atlanta, habían sido pareja durante 33 años, aunque mantenían hogares separados. En 2019 comenzó a perderse mientras conducía, a administrar mal sus finanzas y a tener problemas con el control remoto de la televisión. El diagnóstico (enfermedad de Alzheimer) llegó en 2021.Con el tiempo, Drolet trasladó a Rebecca (cuyo apellido pidió que no se revelara para proteger su privacidad) a su casa. Pero actuar como su cuidadora las 24 horas, ya que necesitaba ayuda con cada tarea diaria, se volvió agotador e insostenible. Rebecca ...